León XIV sorprende al alcalde de Roma con una poderosa declaración que cambiará la historia

La reciente investidura del Papa León XIV ha marcado un hito significativo en la historia contemporánea de la Iglesia Católica. En su primer discurso ante el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, el Pontífice expresó su profunda conexión con la ciudad, abriendo un nuevo capítulo en la relación entre la Iglesia y la administración local. Estas palabras no solo fueron un saludo, sino también un llamado a la colaboración y a la construcción de una Roma más inclusiva y justa.

La llegada del Papa a la Basílica de San Juan de Letrán

El 25 de mayo de 2025, el Papa León XIV hizo su entrada triunfal en Roma en un Volkswagen SUV blindado, un símbolo de la seguridad y del protocolo que rodea a la figura papal. A las 16:00 hora local, el vehículo salió del Vaticano hacia la Basílica de San Juan de Letrán, la Catedral de Roma, donde asumiría oficialmente su papel como Obispo de Roma en una Misa programada para las 17:00.

Antes de llegar a la basílica, el Papa se detuvo en la Plaza dell’Aracoeli, un lugar emblemático que representa el corazón histórico de la ciudad. Este acto fue un momento simbólico que conectó la tradición e historia de Roma con el futuro que el nuevo Papa desea construir.

Un mensaje de unidad y responsabilidad

En su emotivo discurso, el Papa León XIV enfatizó su compromiso con la ciudad y sus habitantes, afirmando: “Hoy puedo decir que por ustedes y con ustedes soy romano”. Esta declaración provocó una gran ovación entre los presentes, subrayando la importancia de su mensaje de unidad y comunidad.

El Pontífice destacó su responsabilidad en el servicio a la diócesis y a la sociedad, señalando que su misión no solo es espiritual, sino también social. “Al comenzar oficialmente el ministerio de pastor de esta diócesis, siento la grave pero apasionante responsabilidad de servir a todos sus miembros”, expresó, dejando claro que su corazón está con la fe del pueblo.

La misión histórica de la Iglesia en Roma

El Papa León XIV también reflexionó sobre el papel histórico de la Iglesia Católica en Roma, mencionando los dos mil años de apostolado que han comprometido a la Iglesia con la comunidad. Resaltó la importancia de acciones concretas como:

• La educación de los jóvenes.
• La asistencia a los más necesitados.
• La dedicación a las artes.
• El cuidado por la dignidad humana.

Este enfoque no solo abarca la dimensión espiritual, sino que también busca abordar problemas sociales y económicos que afectan a la población más vulnerable.

El Jubileo de la Esperanza y su significado

El Papa no dejó de lado el Jubileo de la Esperanza, un evento que su predecesor, el Papa Francisco, había inaugurado. En este contexto, expresó su agradecimiento por el compromiso de la administración local en apoyar esta iniciativa. “Expreso viva gratitud por el compromiso de la administración capitalina”, dijo, destacando la importancia de la colaboración entre la Iglesia y el gobierno para el bienestar de la ciudad.

El Jubileo representa una oportunidad no solo para celebrar la fe, sino también para reflexionar sobre los retos contemporáneos y la necesidad de un compromiso renovado con la justicia social.

La visión del alcalde de Roma

El alcalde Roberto Gualtieri, en su discurso, resaltó el afecto que el Papa tiene hacia la ciudad. Este encuentro en la Plaza dell’Aracoeli simboliza un vínculo duradero entre Roma y la Iglesia. Gualtieri recordó que el último Papa en saludar a un alcalde fue Pablo VI, lo que añade un peso histórico a este momento.

Durante su intervención, Gualtieri mencionó que esta relación ha nutrido a Roma con:

• Cultura.
• Valores éticos.
• Responsabilidad compartida.
• Compromiso con la paz.

Él también destacó que el Jubileo de la Esperanza es una excelente oportunidad para transformar la ciudad, especialmente en su preparación para el próximo Jubileo de los Jóvenes, donde Roma espera acoger a miles de jóvenes de todo el mundo.

Compromiso con la inclusión y los más vulnerables

El alcalde subrayó la importancia de colaborar con la Iglesia en proyectos que dignifiquen la vida de todos los ciudadanos, incluidos inmigrantes y quienes buscan esperanza. Esta colaboración es esencial para crear un modelo social más humano y equitativo.

Gualtieri expresó su deseo de que Roma y el Papa trabajen juntos en una nueva política que priorice las relaciones humanas y la construcción de puentes entre los pueblos. “Estamos felices de que Roma sea ahora su ciudad”, concluyó, prometiendo que la capital será una aliada leal en la misión pastoral del Papa.

La visita de León XIV no solo representa un nuevo liderazgo en la Iglesia Católica, sino también una invitación a todos los romanos a participar activamente en la construcción de una ciudad más justa y solidaria. Esta nueva etapa se abre con la esperanza de que la colaboración entre la Iglesia y el gobierno local genere un impacto positivo en la vida de los ciudadanos de Roma.

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